
Introducción
El trabajo de investigación tuvo por objetivo producir y evaluar tres especies de
microalgas a escala experimental para la obtención de biomasa como insumo
potencial para la elaboración de biodiesel, debido a que en la actualidad; el área
energética enfrenta dos grandes problemas: la disminución de las reservas
petroleras y la contaminación por la quema de los combustibles fósiles,
Fernández-Linares, Montiel-Montoya, Millán-Oropeza, & Badillo-Corona,
(2012), situación que demanda desarrollar tecnologías sustentables, renovables
que permitan cubrir la demanda energética de las actividades antropogénicas Balat
& Balat (2010), siendo una opción promisoria el biodiesel; biocombustible
producido a partir de aceites oleaginosos de plantas (Garibay, Vásquez, Sánchez,
Serrano, & Martínez, 2009), y de microalgas (Cobos, Castro, & Cerdeira, 2014).
En la investigación participó también IMARPE – Instituto del Mar del Perú,
instituto de investigación que preveo cepas de microalgas y agua de mar filtrada
y esterilizada. Además, la evidencia empírica se basa en los trabajos de laboratorio
desde la siembre de cepas, obtención de inóculos y trabajos de laboratorio hasta
la obtención de lípidos. El uso de microalgas para la producción de biodiesel ha
surgido como una opción atractiva, debido a que presentan mayor eficiencia
fotosintética, son más eficaces en la asimilación de CO2 y otros nutrientes con
respecto a las plantas, acumulan entre 20 y 80% de triglicéridos (Chisti, 2011), no
requieren tierras cultivables, demandan menor consumo de agua renovable y
pueden cultivarse en agua salobre (Amaro et al., 2011; Chisti, 2007; Demirbas,
2009).
El proceso de producción de biodiesel a partir de microalgas requiere de la
producción de biomasa de microalgas rica en lípidos, los aceites son extraídos a
partir de la pasta o biomasa de microalgas, y después transformados en biodiesel
y glicerol, mediante la reacción de transesterificación (alcalina, ácida o
enzimática) (Chisti 2008; Schenk et al. 2008).
La generación de biomasa a partir de microalgas y la extracción de aceite para la
producción de biodiesel ha sido estudiada y evaluada de manera muy extensa en
los sistemas abiertos raceway ponds. Los Raceways son sistemas menos caros que
los fotobiorreactores debido a su menor coste de construcción y operación, aunque
la producción de biomasa también es menor (Fernández-Linares et al., 2012).
Las energías renovables se definen según la Comisión Nacional para el Ahorro de
Energía (CONAE) como formas de energía que tienen una fuente prácticamente
inagotable con respecto al tiempo de vida de un ser humano en el planeta, y cuyo
aprovechamiento es técnicamente viable. Dentro de estos tipos de energía se
encuentran: la solar, la eólica (viento), la hidráulica, la biomasa (materia
orgánica), la geotérmica (calor de las capas internas de la tierra) y la energía
oceánica, principalmente. La biomasa, es el término genérico que se refiere al
conjunto de la materia biológicamente renovable (árboles, cultivos), de la que se
puede obtener biocombustibles como el biodiesel, obtenido de aceites de plantas
o algas, y el bioetanol. Actualmente hay un gran interés por la producción de